Los implantes dentales se utilizan para sustituir de manera definitiva la pérdida parcial o total de una o varias piezas dentales. Se trata de pequeñas fijaciones de titanio que se colocan en el interior del maxilar o de la mandíbula del paciente, y está destinado a sustituir la raíz del diente.
Estos implantes dentales estarían fabricado con materiales biocompatibles que no producen reacción de rechazo y permiten su perfecta unión al hueso. El éxito prolongado de su colocación dependerá en gran medida de los cuidados que se lleven a cabo, como veremos a continuación.
Cada año se realizan en España entre 400.000 y 500.000 tratamientos de implantología dental, según datos de la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA). Y es que la implantología ha evolucionado de forma excepcional en los últimos años. Actualmente, el uso de técnicas y materiales innovadores permiten que el éxito de colocación de los implantes dentales se mantengan perfectamente durante muchos años, aunque no debemos olvidar que para prevenir posibles patologías, los implantes dentales necesitan una serie de cuidados e higiene oral especiales.
Una de las patologías que puede surgir es la periimplantitis, o inflamación de los tejidos que rodean al implante, llegando, en el peor de los casos, a una pérdida del hueso que sujeta el implante, con la consiguiente pérdida del mismo a corto plazo. Para prevenir su aparición, será necesaria una exhaustiva limpieza del implante dental para evitar la formación de placa dental. Además, existen otros factores que pueden empeorarla, como el consumo de tabaco o un historial previo de periodontitis.
Los cuidados e higiene especial de los implantes dentales, comienzan en la primera fase del tratamiento de implantología, es decir, justo tras la cirugía de colocación del implante. Tras el postoperatorio, será muy importante que el paciente realice enjuagues con clorhexidina para eliminar posibles bacterias durante los primeros días.
Pasados unos 7 a 15 días, los pacientes podrán reanudar sus medidas de higiene y cepillado dental habituales, durante los tres o cuatro meses que dura la fase de oseointegración (unión estable entre el hueso y el implante). Cabe destacar que, en algunos casos, el mismo día de la cirugía se puede colocar una prótesis provisional, para mantener la estética dental.
A partir de la segunda fase del tratamiento de implantología; la fase protésica, se introducen las siguientes técnicas y materiales en el cepillado:
Por último, y lo más importante para el cuidado de los implantes dentales, resulta imprescindible realizar las visitas periódicas recomendadas en cada caso por el dentista, para que éste revise si se están realizando correctamente las medidas de higiene, para controlar el buen estado del hueso alrededor de los implantes, y en algunos casos, para realizar una limpieza más profunda de la prótesis sobre los implantes.
Clínica Veronica Gil, ha recibido una ayuda de la Unión Europea con cargo al Programa Operativo FEDER de Andalucía 2014-2020, financiada como parte de la respuesta de la Unión a la pandemia de COVID-19 (REACT-UE), para compensar el sobrecoste energético de gas natural y/o electricidad a pymes y autónomos especialmente afectados por el incremento de los precios del gas natural y la electricidad provocados por el impacto de la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania.”
©2024 Clínica Dental Verónica Gil. Desarrollado por: Creados